Estos últimos días he estado con el trabajo hasta los *******, he estado escribiendo unos 927 comedias, casi nada.... tengo la mano que me va a reventar, aunque haya sido a petición de Marta de Nevares (mi "ex") juro que no volveré a hacer tal locura, creo que por un tiempo dejareé descansar mi mano dolorida, encima ni me hace caso como si más de 900 fuera poco para una mujer. Me robó el corazón en el año 1616 después de mi relación con la actriz Lucií Salcedo que también estaba bastante buena je je je.
Y cómo olvidar el día que nació mi hija Antonia, toda una preciosidad, creo que su madre no querrá tener más hijos con lo que ha sufrido en el parto, se escuchaban los gritos día y noche por todo el barrio.
También ese año vino aquí a Madrid Góngora mi eterno enemigo. A el solo le importaba ganar dinero y gastárselo incluso se dedica a engañar a la gente.
Por el 1618 mi mujer intenta lo imposible por anular nuestro matrimonio y encima se mete a monja, al menos no me ha puesto los cuernos con alguien ,podría haber sido peor. Al año siguiente muere el tío con el que se casó, un tal Roque Hernández. Escribí una obra para celebrarlo, esa arpía no se merece estar con nadie.
Este año pasado fui a la beatificación de san Isidro en la iglesia de san Andrés, empecé leyendo una obra burlesca y una oración en verso, estaba tiritando del frío que hacía no seépor qué abren las ventanas con los grandes ventanales que tiene.
Mi hijo se mete a la milicia, una desgracia para mi, esperaba que siguiera mis pasos y mi hija Micaela entra en un convento. Parece que cada vez me estoy volviendo más solo.
14 Junio 1621 Madrid
Y cómo olvidar el día que nació mi hija Antonia, toda una preciosidad, creo que su madre no querrá tener más hijos con lo que ha sufrido en el parto, se escuchaban los gritos día y noche por todo el barrio.
También ese año vino aquí a Madrid Góngora mi eterno enemigo. A el solo le importaba ganar dinero y gastárselo incluso se dedica a engañar a la gente.
Por el 1618 mi mujer intenta lo imposible por anular nuestro matrimonio y encima se mete a monja, al menos no me ha puesto los cuernos con alguien ,podría haber sido peor. Al año siguiente muere el tío con el que se casó, un tal Roque Hernández. Escribí una obra para celebrarlo, esa arpía no se merece estar con nadie.
Este año pasado fui a la beatificación de san Isidro en la iglesia de san Andrés, empecé leyendo una obra burlesca y una oración en verso, estaba tiritando del frío que hacía no seépor qué abren las ventanas con los grandes ventanales que tiene.
Mi hijo se mete a la milicia, una desgracia para mi, esperaba que siguiera mis pasos y mi hija Micaela entra en un convento. Parece que cada vez me estoy volviendo más solo.
14 Junio 1621 Madrid
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